Lo único que tiene sentido

Floto perdido por las calles de mi ciudad
Entre corazones fibrilando
Perdido
Entre huesos que se pasean como huesos
Perdido 
Entre neuronas que fallan y se sobreexcitan
Perdido
Entre piel
Perdido 
Entre risas
Perdido 
Entre miradas
Perdido 
Entre preguntas
Perdido 
Entre historias pasadas
Perdido
Entre historias presentes
Perdido
Entre dudas
Perdido
Entre síes pero noes
Perdido
Entre agujeros humanos
Perdido
Entre yo a ti  pero a ti no
Perdido 
Entre whatsapps
Perdido
Entre mí mismo
Perdido 
Entre tú?...qué va!... tú no estás perdido
Perdido
Como una cabra entre los cientos de nuevos centros comerciales que salen en las ciudades como setas
Perdido
Como cuando quieres que te digan y no te dicen
Perdido
Con mayúsculas
Perdido 
Con minúsculas
Perdido
Intentando no hacer ninguna gilipollez
Perdido
Subido a una tabla con calma chicha en el Pacífico
Perdido
Como se pierden las llaves, la cartera, la cabeza
Perdido
Como para estar escribiendo todo esto sin saber cuando voy a parar
Perdido
De cojones
Perdido
Con dos narices
Perdido
Entre frío y calor
Perdido
Vagando por los pasillos de los supermercados
Perdido
En la madrugada a las 4 de la mañana sin ganas de volver a casa
Perdido
Como para no encontrarme de aquí al verano del 2025 (espero que no, que desperdicio)
Perdido 
Como cuando no sabes que ponerte
Perdido
Como cuando te pica y no sabes si rascarte
Perdido
Porque quiero perderme  tranquilamente, sin rollos, sin follones, sin ganas de amargarme la vida y no puedo.

Lo único que tiene sentido en este momento es que tengo la sensación de poder seguir escribiendo horas y horas sobre mi perdición.