"de vez en cuando los amigos tienen el deber de hacerse sentir como cuando eran niños"

Un día más me quedaré sentado aquí
en la penumbra de un jardín tan extraño.
Cae la tarde y me olvidé otra vez
de tomar una determinación.
Esperando un eclipse
me quedaré,
Persiguiendo un enigma
al compás de las horas.
Dibujando una elipse
me quedaré,
entre el sol y mi corazón.
Junto al estanque me atrapó la ilusión
escuchando el lenguaje de las plantas.
He aprendido a esperar sin razón.
Soy metálico en el Jardín Botánico
Con mi pensamiento sigo el movimiento
de los peces en el agua.
Un día más me quedaré sentado aquí
en la penumbra de un jardín tan extraño.
Cae la tarde y me olvidé otra vez
de tomar una determinación.
Esperando un eclipse
me quedaré,
Persiguiendo un enigma
al compás de las horas,
Dibujando una elipse
me quedaré,
entre el sol y mi corazón.








































lunes, 2 de febrero de 2015

Sombras



Amor incondicional porque es capaz de conectar con tu esencia
porque afecta a tus  inquietudes
porque se sufre cuando el otro no sonríe
porque así se entienden las penas y tristezas 
y por supuesto, se entienden las alegrías.
Porque se estuvo y se está al lado del amado, no solo físicamente.
Porque no se juzgan los actos  y además, ni se pretende.
Porque no se demanda nada y,
porque se acepta lo que se da, (así que cada uno debe  decidir lo que va a dar)
y de esta forma uno se siente más cerca del otro (si lo que se recibe es suficiente)

Porque se necesita  ver sonreír, reír, semisonreír, o algo parecido y,
porque el otro también  lo necesita  y lo hace cuando le oye, le imagina, le siente.
Porque si han sido pocas ocasiones en estos últimos tiempos
deberían generarse más () para poder amarse incondicionalmente sin esfuerzos.
Porque el corazón se aleja si no se da de este amor.
Es difícil pero no imposible.
Porque no cuesta decir ni te quiero, ni te querré. Te amo y te amaré
sin condiciones. Sin contratos. Siendo como se es. 

El amor  no necesita de chantajes y silencios
huye de acusaciones y juicios
debe brotar puro, sin barreras
sin obstáculos y sin achaques.
Sin dudas y sin penas.
Sin tristezas ni lamentos.
Debe fluir, entender, aprender, recordar, escatimar (los malos rollos también) y ofrecer.
Sentir y luchar...hasta el final. Hacer sentir al otro que se está peleando por ello si fuera necesario.
Debe tener claro el horizonte, su camino, sus tropiezos.
Y en el punto de saber lo se quiere y no saber como hacer, 
como tampoco saber amar condicionalmente,
sólo queda un adiós incondicional para no generar un caos absurdo.
Para no dar más alimento  al hombre araña,
que se recrea tejiendo la tela del aburrimiento. la hostilidad, miedo,
desidia, enojo interior oculto y temblor constante al vivir.


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