"de vez en cuando los amigos tienen el deber de hacerse sentir como cuando eran niños"
Un día más me quedaré sentado aquí
en la penumbra de un jardín tan extraño.
Cae la tarde y me olvidé otra vez
de tomar una determinación.
Esperando un eclipse
me quedaré,
Persiguiendo un enigma
al compás de las horas.
Dibujando una elipse
me quedaré,
entre el sol y mi corazón.
Junto al estanque me atrapó la ilusión
escuchando el lenguaje de las plantas.
He aprendido a esperar sin razón.
Soy metálico en el Jardín Botánico
Con mi pensamiento sigo el movimiento
de los peces en el agua.
Un día más me quedaré sentado aquí
en la penumbra de un jardín tan extraño.
Cae la tarde y me olvidé otra vez
de tomar una determinación.
Esperando un eclipse
me quedaré,
Persiguiendo un enigma
al compás de las horas,
Dibujando una elipse
me quedaré,
entre el sol y mi corazón.
martes, 17 de febrero de 2015
Cursi le rías
A veces, en la vida suena una música que yo no sé bailar
tiene unos sonidos que no entiendo ni les encuentro el ritmo.
No entiendo su melodía ni su estribillo
Esa canción se repite día a día y por más que intento, no sé qué pasos dar.
A veces, en la vida es necesario el amor para afinar esas notas, para hacerlas vibrar.
Entonces se escucha una música angelical y surgen los pasos y el baile por sí solos que hacen que el mundo se entregue y caiga a tus pies.
¿Oyes algo, allá a lo lejos?
A veces, el tiempo nos utiliza
para hacer de nosotros simples organismos
que pululan por el mundo
sin ningún objetivo
en febreros vacíos
sin ningún sentido
en martes
sin finalidad
en tardes
sin luz
en minutos
con espesura.
(mira, hoy no puedo dar más)
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