Somos víctimas de nuestra tonta creación

Espero. Creo que esperar es bonito.
El día que uno deje de esperar, ¿qué otra cosa se puede hacer?
Se dice que esperar es no vivir el presente pero esperar activamente tiene una fuerza tal que puede mover ruedas de molino. Si se hace de forma constructiva, incluso ser productivo.
Cuando pronuncio esperar, me viene a la mente un gran árbol.
Con un tronco robusto, oscuro y tranquilo. Con sus raíces bien incrustadas en la tierra.
En cada una de sus ramas, de su extremo, cuelga una espera.
Un beso
Una caricia
Una persona
Un viaje
Una llamada
Un "algo" que en aquel momento  no sucedió.
Una sensación
O que desaparezca una sensación
O volar
O aterrizar
Un regalo
Una mirada
Una vida...

Ese árbol se llama -esperal-
Y sus frutos los puedes coger y saborear.
O los puedes dejar que caigan por maduros.
El -esperal- es un árbol situado a pocos metros de cada uno de nosotros. Aparece sobre todo con una mirada lejana y pensativa , si se riega, dará muchos frutos. Si se cuida y lse e habla con cariño, se puede obtener una buena cosecha de esperas
Solo tienes que levantarte, trepar y comerte sus frutos.
Ya sabes, desde abajo, sin moverte no hay comida. Solo hay desesperación. 
Trepar al -esperal-, elegir la espera que más  guste y comerla. Saborearla o tragarla rápido para que desaparezca.

Yo espero muchas cosas...
A ver si me las puedo comer...
Me voy a regar. A mí mismo y al -esperal-